Cada 30 de julio se conmemora el Día Mundial contra la Trata de Personas, declarado así por la ONU, con el objetivo de concienciar a las personas, y sobre todo a los gobiernos, acerca de la grave problemática que ha acarreado la expansión de este delito a nivel mundial.
Existen distintos fines de trata, entre las que se encuentran la explotación sexual, los trabajos o servicios forzados, el matrimonio servil, la servidumbre doméstica, la mendicidad ajena, y el tráfico de órgano.